Ayer compartíamos con vosotros la situación del peligro de los gorriones en las ciudades y la propuesta de crear comederos reutilizando recipientes o con elementos de fruta.
Pero… ¿qué pasaría si antes de la elaboración proponéis a los niños y niñas una experiencia con la que estimular sus sentidos y divertir durante una hora?
Te proponemos que prepares esta “mesa sensorial” y que compartas con nosotros la experiencia de la familia.
¿qué voy a necesitar?
· 1 bandeja con fondo
· Alpiste
· 2 o 3 Cucharas
· 1 o 2 cazuelas pequeñas o de juguete (de metal mejor)
· 1 tarro pequeño de conservas (de vidrio)
· Las cascaras de una naranja exprimida
· Un cepillo de barrer, cerca de donde propongas la actividad.
¿Cómo se lo presento al niño/niña?
Explica a tu hijo / hija la situación de hambre que están pasando ahora los gorriones y otros pajaritos de la calle y proponles la creación del comedero. ¡les encantará la idea de ayudar a los animales!
Prepara con ellos la bandeja y la colocación de los materiales y diles que es para jugar y preparar el comedero y colocad juntos los elementos. Pídeles que vayan a buscar una taza de juguete, la cazuela, las cucharas….
Por último, utiliza una jarra en la que hayas echado previamente la cantidad de alpiste suficiente para que ellos, viertan y repartan con seguridad el contenido del alpiste en las cazuelas.
¡LISTO! Coloca la bandeja en una mesita baja para que ellos puedan manipular todo lo que haya en su interior y deja que se diviertan, realizando trasvases y utilizando los elementos.
El sonido del alpiste al caer en diferentes recipientes, la diversión de la textura al cogerlo con las manos, la complejidad y coordinación para cogerlo con la cuchara y rellenar un tarro con una entrada de menor diámetro que otros y la alegría de ayudar a los animales, la paciencia para ver a los pájaros cada mañana y el respeto para no asustarlos… son algunas de las experiencias que aporta este sencillo juego que puedes realizar en casa.
Cuando veas que se cansan, propón verter el alpiste sobre las dos cáscaras de naranja y colocarlas en el suelo del balcón o atarla a una cuerda para colgarla de una barandilla. La gracia es que cada mañana, puedan asomarse y disfrutar de las visitas de los pájaros para comer y poder rellenar la naranja, con facilidad cuando apenas quede alpiste.
Un consejo: el alpiste caerá al suelo… Así que, ten paciencia y ves barriendo a cada ratito, sin interrumpirles en la experiencia.